Tener un perro es una gran responsabilidad. Cuidar perros en casa requiere tiempo y va mucho más allá de procurarle agua y comida. Cuida a tu perro proporcionándole un hogar, alimentación sana y saludable, ejercicio y actividades lúdicas y visitas regulares al veterinario de confianza.
1. Identifica a tu mascota
Puedes identificar a tu mascota de varias formas, las más conocidas y fundamentales son:
- Placa de identificación. Se coloca en el collar o el arnés que le pongas a tu perro, puedes incluir una placa metálica con su nombre y tus números de teléfono. Aunque lo hayas educado muy bien y extremes las precauciones, tu perro puede escaparse. Para quedarte más tranquilo, procura que esté identificado con este tipo de placas, así cualquier persona que lo encuentre puede localizarte fácilmente para devolvértelo.
- Microchip. Es tan necesario como fundamental. A diferencia de la chapa, no puedes ponérselo tú en casa, debes acudir al veterinario. Aprovechas de esta forma su presentación en la consulta y unos consejos prácticos para cuidar a tu perro.
2. No dejes objetos peligrosos a su alcance
Podríamos decir que una mascota es como un niño pequeño. Tiene la necesidad de explorarlo todo y llevárselo a la boca. Para evitar accidentes en casa, cuida de tu perro y no dejes a su alcance nada que pueda causarle daño. Elimina objetos punzantes o cortantes, plantas tóxicas, objetos delicados que puedan romperse fácilmente como porcelana o vidrio.
3. Una alimentación de calidad
Es fundamental para tu perro estar bien alimentado. La norma número uno para cuidar perros en casa es ofrecerle una dieta variada y saludable. Puedes optar por dietas secas o húmedas, incluso por una alimentación natural y cocinar tus propias recetas. Lo importante es elegir un alimento de gama alta, completo, cuyos ingredientes sean de calidad. Solo así procurarás que tu perro crezca sano y feliz.
4. Báñalo y cepíllalo
La higiene es otro aspecto que no debes descuidar. Cepilla a tu perro diariamente, o varias veces a la semana si tiene mucho pelo. Con este gesto, además de eliminar pelo y piel muerta, estrechas, lazos con tu perro y afianzas el vínculo. Aprovecha y cuida a tu perro al máximo.
5. Llévalo al veterinario
Las visitas al veterinario solo deberían ser de rutina. Nadie quiere ir corriendo al veterinario por una emergencia. Aunque los accidentes ocurren, evita enfermedades o infestaciones de parásitos en tu perro con unos buenos hábitos de higiene, una alimentación adecuada y visitas periódicas al veterinario.
6. No lo dejes solo
Nunca dejes solo a tu perro, en el carro, durante las horas de mucho calor, como podría ser medio día. Si no te queda más remedio y debes dejarlo solo en casa, procura que no sea demasiado tiempo.
7. Premia su buen comportamiento
Si tu perro hace cosas bien y son comportamientos que son aceptados o los que buscas, prémialo. No premiar con snacks de mala calidad, procura que sean productos naturales. También podrías premiar su con caricias, alentándolo con frases motivadoras.
No premiar malas conductas, o bien dar refuerzo a conductas no deseadas.
8. Educación y adiestramiento canina
Una de las mejores cosas que puedes hacer por tu perro es brindarle educación y adiestramiento canino. Enséñale a hacer sus necesidades en los lugares adecuados, a socializar con otras personas y animales. Es muy importante hacerlo mientras es un cachorro, y que sea un aprendizaje para toda la vida. Si está educado, será más fácil pasear con él, llevarlo al parque, al veterinario o incluso en un medio de transporte privado u público.